Una roca solitaria, un océano embravecido, el derrame líquido de un desgüe. La fluída dinámica del mar, sus incesantes cambios de rostro y estado de ánimo y la luz moteada de su superficie te lleva atraído a la frágil orilla, a la línea que separa la tierra del mar – a veces en salvaje oposición, otras en suave caricia – a nuestros esfuerzos por aprovechar o retener el mar y, finalmente, a la propia naturaleza reparadora del agua.
El hercúleo malecón de Empuries lleva la dignidad y nobleza que sólo puede ser encarnado por algo construido hace más de 2500 años. Con el fin de comerciar con las tribus ibéricas, los griegos construyeron el puerto de Emporion durante su expansión comercial en el Mediterráneo occidental en el siglo 7 aC. En 218 aC legiones romanas desembarcaron aquí en un esfuerzo por cortar la línea de suministro de Aníbal durante las Guerras Púnicas, comenzando, en esencia, la conquista romana de la península. La ciudad romana prosperó, convirtiéndose, con el tiempo, la capital del condado carolingio de Empúries. Fue abandonada en el siglo nueve después de repetidas incursiones vikingas.
La última de las goletas madereras de la costa del Pacífico, el Wapama permaneció durante años sobre una barcaza en Richardson Bay en un esfuerzo desesperado de preservar su casco en descomposición. No pudiendo retrasar su inexorable declive, el Servicio de Parques Nacionales inició su desmantelado en 2013.
De vez en cuando, fuertes vendavales de invierno llegan del este y tocan tierra en las costas del noreste de España trayendo olas enormes y amenazantes mareas. La llevantada de 2009 que arrasó la Costa Brava destruyó el dique de L’Estartit, inundando casas frente al mar y dañando decenas de embarcaciones amarradas en el interior del puerto. Casi un kilómetro tierra adentro, los agricultores encontraron peces en sus campos, traídos por la tormenta.
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Las fotografías son pigmentos de archivo sobre papel Hahnemühle Photo Rag Pearl 320 gr. en una edición de 10 + 2 copias de exposición y miden aproximadamente 36 x 55 cm. Otras versiones existen en gelatina de plata de diversas medidas.
